Beires: historia, naturaleza, minería, gastronomía y encanto alpujarreño
Beires - Almería
Beires se encuentra en un lugar privilegiado por su especial ubicación en la Alpujarra almeriense, a 917 metros de altitud, y en una encrucijada de las dos vías que dan acceso a la Sierra, tanto hacia Laujar y Fondón como hacia Ohanes.
Su belleza paisajística y arquitectura singular, con sus blancas casas, calles empinadas, antiguas huertas y balsas, la magia del agua. Todo ello le da un encanto especial.
Su escasa población, que ronda los 130 habitantes, lo convierte en un lugar tranquilo, relajante, ideal para el descanso.
Beires ha sabido conservar su paisaje natural y su agricultura tradicional en muchas de las antiguas huertas, cultivadas con primor por los vecinos.
Este bello rincón, ubicado en el Parque Natural de Sierra Nevada, nos ofrece múltiples posibilidades para disfrutar del turismo activo, cultural, de naturaleza y gastronómico. Su historia, muy vinculada a la minería del hierro, se puede conocer en el Centro de Interpretación o Museo Minero. También podemos realizar la Ruta Minera Urbana, en la que encontraremos paneles informativos en distintas calles del pueblo. Para los más activos se puede realizar la ruta hacia el Coto Minero, por el sendero que recorrían los mineros cada día.
Beires cuenta con un patrimonio histórico destacado. El primer referente es la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Misericordia, dedicada al patrón del pueblo, San Roque, construida en torno a 1676 y ampliada en torno a 1782. La plaza y el mirador cercanos son un lugar ideal para descansar y contemplar el paisaje.
Pasear por sus calles es un verdadero lujo. A la entrada al barrio del Zambrón, antiguo asentamiento de Beires, se encuentra La Ermita de Ánimas, de pequeñas dimensiones pero muy apreciada por los vecinos, con larga tradición en el pueblo y, a su lado, La Fuente del Chorrillo, clave en la historia de Beires.
Un paseo por estas calles es una experiencia para los sentidos. Flores, blanco, árboles singulares. No podemos dejar de visitar el Puente del Zambrón, que divide el pueblo en dos barrios. Al lado del puente se encuentra la balsa de La Pileta, que riega una parte de las huertas y está rodeada de frondosa arboleda.
Fuera del pueblo, en un lugar estratégico para vigilancia de todo el valle, se encuentra El Castillo, conocido por los vecinos como “el castillo de los moros”. Conserva algunos tramos de lienzos de muralla, restos de torreones y de un aljibe. Declarado BIC en 1993. Es de origen califal, pero cobró importancia en el Reino Nazarí. Por el momento no es visitable.
Cerca de Beires también está la Ermita de los Desamparados, del siglo XVI, compartida con Almócita y Padules.
Para los amantes del turismo activo y de naturaleza hay trazada una ruta desde el pueblo hasta el Área recreativa de Nacimiento, un lugar de alto valor medioambiental, por el margen del barranco de los molinos, el de Arriba y el de Abajo, que nos transporta a otra época de moliendas de grano y de aguas en abundancia. Además de este sendero de pequeño recorrido existe otro que sube hacia el Coto Minero, de mayor dificultad pero con unas vistas espectaculares.
Además, Beires cuenta con una oferta de alojamiento rural de calidad, con establecimientos privados y un albergue de titularidad municipal. No falta la oferta gastronómica en la que degustar los productos y sabores típicos de la comarca.
Beires es un lujo para los sentidos. Un oasis de tranquilidad en plena Alpujarra.