Bienvenido a Senés, pueblo hospitalario y amable de blanco y pizarra que te abre sus puertas para que disfrutes intensamente. Aquí se respira aire puro. Piensa que donde pisas pisaron desde hace cientos de años otros pies y dejaron su huella con esfuerzo y respeto. Te proponemos que sigas las flechas azules para descubrir la historia, las tradiciones, la belleza de las huertas, la magia de la piedra en las casas y en los balates, la vitalidad del agua en La Fuente y en las acequias, y tantos rincones hermosos que otros construyeron a lo largo del tiempo. Camina sereno, observa, disfruta. Viaja en el tiempo y cuenta a quien te quiera escuchar que aquí vive la humilde felicidad.
Al inicio de la ruta una escultura homenajea a los emigrantes, que tuvieron que abandonar Senés en busca de sustento. Seguimos hacia las huertas, algunas aún en cultivo, donde el agua hace su magia y la pizarra aparece en verdaderas obras de arte en balates y portadas. Entre calles con blanco, pizarra y flores visitaremos el Centro de Interpretación de Moros y Cristianos, una tradición que se pierde en el tiempo. Siguiendo el camino del agua, junto al viejo molino y la balsa grande, llegamos a La Fuente, donde se encuentra La Casa del Agua, que interpreta uno de los conjuntos hidráulicos mejor conservados de Andalucía, con fuente, balsa, lavadero y molino. Desde allí subiremos a la antigua Almazara, restaurada e interpretada, y disfrutaremos de los hermosos tejados de aleros de pizarra, de unas vistas únicas de la antigua Alcazaba y de la imponente sierra y barrancos. Caminaremos siguiendo las flechas hasta la plaza Rey Felipe VI, donde se encuentra la Iglesia de Santa María, con el Divino Rostro, patrón de Senés, unas pinturas muy especiales y una misteriosa lápida. Seguiremos por angostas y empinadas calles entre casas de pizarra hasta los dos miradores, antiguas eras de trillar. Desde allí descenderemos hasta el inicio de la ruta, descubriendo nuevos rincones con encanto.
Y para recuperar fuerzas, imprescindible disfrutar de las tapas en los bares.
Si además de esta ruta quieres conocer los alrededores puedes hacer el sendero del Castillo, de 4,7 kilómetros, que se inicia en La Fuente. Si cuentas con más tiempo y ganas de hacer kilómetros, puedes realizar los tramos del sendero GR 244 que conectan con los vecinos pueblos de Velefique y Castro de Filabres.