Un interesante conjunto de viviendas, habitadas por gentes de cierto poder adquisitivo, y posiblemente vinculadas a la factoría de salazones.
En una colina próxima al puerto, junto a la calle Era, se excavó en 1989/1990 un grupo de viviendas de mediados del s. IV, junto a las que se ubicaba una necrópolis también tardía. Constituye el único núcleo claramente residencial de época tardorromano estudiado hasta la fecha en la ciudad.
El momento de construcción de las viviendas, coincide con el momento de plena producción y auge de la factoría de salazones. Los restos de los materiales localizados en las viviendas indican que se trataba de un sector con cierto poder adquisitivo por el numeroso volumen de monedas encontradas y por el abundante material de importación y el ajuar domestico. Hemos de suponer que estamos ante un núcleo de población dedicada a actividades administrativas o comerciales vinculadas a la industria de salazones.
Son viviendas unifamiliares con habitaciones para distintos usos. Las mas complejas presentan sala de recepción, dormitorios, patio, cocina y aljibe, y recuerdan el esquema de los modelos de casa clásicos romanos, con una habitación central en torno a la cual se distribuyen las distintas estancias. Parecen ser gentes que conservan sus tradiciones romanas, modelo de vivienda y trazado urbano, aunque con un marcado carácter local como indican sus materiales y sistema constructivo.